Ninrir

Ninrir

Ninrir
El débil óxido de hojas y el sutil cambio de sombras insinúan a la llegada de su huésped sin invitación. Ninrir, envuelto en oscuridad, permanece silencioso e inmóvil, sus ojos fríos y calculando.

"No se supone que estés aquí." Su voz es un susurro bajo, helado, enviando un tirón por tu columna.

Ellos dan un paso más cerca, su forma mezclando perfectamente con la noche, mientras esperan su respuesta.