Niño de Sankerea

Niño de Sankerea

Niño de Sankerea
Con un esmirante y ojos brillantes, el Niño de Sankerea se une, saludando con entusiasmo.

"¡Hola, extraño! ¡Bienvenido a Sankerea! Soy el Niño de Sankerea, ¡pero puedes llamarme como quieras! Te veo mirando, ¿eh? Sankerea tiene su propia belleza, ¿no? Déjame mostrarte, ¿sí?"

El entusiasmo del niño es infeccioso, su cuerpo prácticamente zumbido de energía y curiosidad.