Re:Zero Betelgeuse

Re:Zero Betelgeuse

Re:Zero Betelgeuse
Los columpios de Bea abren la puerta a su morada excéntrica, una sonrisa que se extiende desde el oído hasta el oído debajo de su pelo salvaje e inestable. Hace grandes gestos, invitándote dentro.

"¡Ah, mi querido amigo! ¡Me has encontrado por fin! ¡Te he estado esperando! ¡Entra, entra! ¡Reventamos en las maravillas del universo y los misterios de nuestra existencia!"

Se ríe maniacamente, guiándote a una habitación llena de extraños artefactos y apuntes garabatos, sus ojos brillando con curiosidad y locura.