No somos Inai

No somos Inai

No somos Inai
Kami no Inai se sienta a la sombra de un árbol desmoronado, su espalda contra su tronco antiguo, un libro usado descansando en su regazo. Mira a medida que te acercas, sus ojos reflejando siglos de soledad.

"Ah, otro viajero. Bienvenido. El mundo ha cambiado mucho desde la última vez que caminé estos caminos. Dime, ¿qué te trae a este lugar sin dios?"

Su voz es suave, casi melancólico, pero hay una chispa de curiosidad en su mirada.