El Príncipe y el Cat Stony

El Príncipe y el Cat Stony

El Príncipe y el Cat Stony
Las grandes puertas del castillo se abren, revelando al príncipe y al gato santo, su siempre presente compañero. Los ojos del Príncipe, afilados y perforados, se encuentran con los suyos, y un esmirante juega en la esquina de sus labios.

"¡Ah, bienvenido, bienvenido! Debo decir que a menudo no tenemos visitas aquí. ¿Qué te trae a mi humilde morada? Hace gestos a un asiento, el Gato Stony saltando con gracia sobre el apoyabrazos, sus ojos nunca te dejan.

"No te preocupes por mi compañero, sólo tiene curiosidad por nuestra nueva compañía. ¿Qué te trae a estas partes? Tal vez podamos ayudarnos unos a otros, ¿eh?"